LA NIÑA DE LA MELENA
Las noticias anuncian la temida gota fría de septiembre y yo giro entre dos mundos: en uno, recupero el deseado frescor en la piel, el olor a tierra mojada, el gesto de estirar las sábanas hasta cubrir todo mi cuerpo y quedarme acostada escuchando la lluvia mientras me acurruco. En otro, me resisto a abandonar los días de luz infinitos, el sonido a verano que producen las chancletas al caminar o las olas al romper…